POR LUCIANO DE CECCO

 

Como muchos habrán visto en mis redes sociales, me enganché con la transmisión de varios partidos de la nueva temporada de la Liga Argentina masculina. También sucedió lo mismo con la A2 masculina y, ahora, con la Liga femenina. Más allá de que la mayoría de los integrantes de la Selección vivimos gran parte del año en el exterior –en mi caso, hace más de diez años que jugué por última vez para un club de mi país-, tenemos sentido de pertenencia. Por eso, a mí me gusta y me interesa saber cómo están la Liga y nuestro vóley en general.

Cuando uno vive muy lejos de donde nació, generalmente tiene una curiosidad natural y hasta cierta intriga por cosas que ocurren cotidianamente en el país, con la gente que uno quiere, y por supuesto que a mí me despierta inquietud ver cómo fluye el vóley argentino.

Durante mi aislamiento por haber dado positivo en el testeo de COVID, muchas de mis cenas estuvieron acompañadas por esos partidos. Las transmisiones de la Liga, a través de TyC Sports Play, se ven muy bien, con muy buena calidad. Las de la A2 podrían mejorarse, porque suele haber una sola cámara y está ubicada muy alta respecto de la cancha. De todos modos, vale el esfuerzo por compartir, sin restricciones, todos los juegos del torneo.

Estar pendiente de estos partidos y compartir ese interés en mis redes sociales es, también, una forma de apoyar la Liga y la A2 y darle visibilidad al vóley argentino, algo que tanta falta nos hace. Cuando interactúo en redes, trato de hacer partícipes a los clubes, para que tengan un ida y vuelta con el público cuando sus equipos están jugando. Son pequeños gestos que suman para la difusión del deporte en general y del vóley en particular. Además, es algo que me gusta. No lo hago por compromiso.

En este punto, quiero agradecer especialmente a José Montesano y a los productores de TyC Sports que me permitieron acceder, desde el exterior, a las transmisiones de TyC Sports Play con los partidos de la Liga. ¡Estoy súper agradecido con lo que hicieron por mí!

Este viernes también estuve prendido a la transmisión de DeporTV en el inicio de la Liga Femenina, con el partido entre Boca Juniors y Gimnasia y Esgrima La Plata.

Otra cuestión interesante es que, al seguir equipos o jugadores que están desarrollándose en Argentina, puedo interactuar de otro modo y compartir opiniones con gente del ambiente del vóley. A esos partidos tienen acceso casi todos, por lo que puedo ser parte de conversaciones con algunas personas con la que me gusta estar en contacto. No pasa lo mismo con la Súper Liga de Italia u otros torneos europeos para los que hay que pagar un abono en dólares: ahí se complica el acceso para muchos y el grupo de una eventual charla queda muy reducido.

En los días de aislamiento y en las últimas semanas también estuve viendo otros deportes, además de algunos documentales y series. De las transmisiones en vivo, me enganché con algunos partidos de la NBA y sobre todo con la Euroliga de básquet, un deporte que me apasiona, y también vi bastante tenis: el Abierto de Australia y los torneos previos.

Soy “pro deporte”, así que miro un poco de todo. Me interesan mucho las diferentes formas en que los deportistas o los equipos afrontan cada competición, cómo exponen su deseo de ganar o qué decisiones toman en momentos decisivos. Eso es algo que me intriga desde siempre: me hace meterme en la cabeza de los otros deportistas.

Más allá de ver partidos en vivo, también pasé muchas horas con documentales y series. De los documentales deportivos, últimamente me atraparon el del “Cholo” Simeone y el de Neymar. Y hace poquitos días, por el segundo aniversario de su muerte, me gustó uno sobre Kobe Bryant. Entre las series, actualmente estoy viendo Doctor House y El Marginal. Como verán, en la variedad está el gusto.

¡Gracias a todos y apoyemos, cada uno desde el lugar que pueda, el desarrollo del vóley argentino!